Un día muy especial para la comunidad
roquera capitalina, ya que luego de varios intentos fallidos, la organización Gillmanfest logró concretar un evento
similar a los que nos tienen acostumbrados en el interior del país, aunque con
dimensiones menores, sin la presencia del promotor (Paul Gillman) y bajo
condiciones que no manejaron completamente ellos. Por ello, muchos pensamos que
este Gilllmanfest, fue no solo “especial”,
sino también diferente.
Cerca de 5.000 personas dijeron
presente en las instalaciones del Centro Internacional de Exposiciones de
Caracas “CIEC”, para presenciar un show conformado por cuatro buenas bandas
nacionales y unos invitados de lujo para la ocasión, los norteamericanos Testament.
Antes de las siete de la noche se dio
inicio al evento y la banda Mashkera sería
la encargada de arrancar con el asunto. Estos panas de Caracas dieron una buena
imagen en cuanto a su presentación de esa noche, más aun tomando en cuenta que
apenas tuvieron un par de días para preparar su presentación, pues, recordemos
que luego de una “telenovela pública” la banda Arkangel y la productora Aleindigo
no lograron ponerse de acuerdo para concretar la presentación de los
valencianos en el show. Por esta razón y de manera emergente, Mashkera fue incluido a última hora y
afortunadamente, no decepcionaron.
Los caraqueños mostraron un buen
desempeño en tarima, aunque algo estáticos. Por momentos la poca movilidad de
los integrantes hizo el show un poco monótono, pero salvo ese detalle, tuvieron
una presentación bastante aceptable. Mashkera
está formado actualmente por Walter Gangi en la voz y guitarra rítmica,
Jefrey Sánchez en la líder, Carlos Cachón en el bajo y Alexis Cachón en la
batería. Entre los temas que pudimos disfrutar esa noche,
destacaron: "Renaciendo mentes", "De que estamos hechos",
"Hasta siempre" y "Caos y descontrol". Además nos brindaron
una buena versión del súper clásico de Metallica “Creeping Death”.
Unos minutos de espera y otros de los
locales, Ashes., hacían acto de
presencia sobre la tarima. Ashes es una
banda formada en el año 2008 con el concepto de hacer música para un género
fuerte, veloz e impactante, con un enfoque actual, moderno y rotundo. Con
claras influencias de bandas como Lamb Of God o Slayer, estos panas demostraron
por que Ashes, es una banda de tanta
proyección a nivel nacional y que su grito de guerra, no es solo una expresión: Caracas fucking metal!
Ash to Ashes, Spit Out, Mastermind, Ancient Fate, Broken World y Machine
of Hate fueron los seis temas que Edwin (3D) Sambrano; Marcos (Marc)
Burgos; Jonathan Arévalo (Musul) y Víctor Rodríguez (Viktor) nos regalaron esa noche.
Luego de un corto tiempo la tercera banda de la noche, daba inicio a
su presentación. Se trata de los orientales Dissonath. Esta interesante banda de Puerto La Cruz, arrancó su presentación
con algunos de sus integrantes un tanto nerviosos durante el primer y quizás
el segundo tema. No se les veía del todo sueltos en su show. Sin embargo, una
vez superados los primeros minutos, se ajustaron bastante bien y brindaron una
muy buena actuación, con temas complejos, pesados y bien ejecutados, dejando
ver sus claras influencias, mezclando estilos como el Thrash, Power, Heavy y Death Metal.
Durante su show (el más extenso de las bandas nacionales), Daniel Haddad en la voz, Ellis Martínez y Alejandro Lobo en las guitarras, Luis Malavé en el bajo y Juan González en la batería, nos dieron un repaso por sus cuatro producciones discográfica, siendo los temas presentados esa noche: Calculated Extinction, Destruction Statement, Eternal Hope, Infected World, I Beg for Assassin Blood, Violent Manipulation, Awaken y Criminal Mind.
Con su acostumbrado sello de calidad, mismo que ya demostraron durante
los shows con bandas de la talla de Obituary,
Krisium, Amputated Genitals o Mortificy, Dissonath
se alza como una banda a ser tomadas en cuenta dentro de la movida metalera
venezolana.
Tras una corta pausa, la siguiente
banda de la noche y última de las nacionales subía al escenario.
Dischord
es
una de esas bandas que das por seguro que darán un buen show. Ya es costumbre
verles muy sueltos y seguros sobre las tablas, pues, la experiencia que estos
caraqueños han logrado acumular durante su corta, pero muy positiva carrera,
les permite ser una buena opción a la hora de buscar buenas bandas que sepan
dar buenos show. Lamentablemente para los presentes, esta noche no fue así del
todo y no por culpa de la banda. Un aparente retraso en los horarios previstos
para todo el festival, pareció ser la razón por la cual la banda, solo pudieron
tocar algo cercano a 20 minutos.
Buscamos una explicación para lo
ocurrido y ni la misma banda lo tenía muy claro, solo alcanzamos a saber que la
información que les dieron, fue esa; que ya no había mas tiempo disponible,
pues, ya tenía que ser habilitada la tarima para Testament.
Más allá de lo anteriormente escrito,
los pocos temas que pudieron brindarnos el conocido Victor Villanueva cantante
y líder indiscutible de la banda, los guitarristas Daniel Silva y Luis Villar,
el bajista Tomas Pérez y el baterista Jorge González, fueron de altísima
calidad dentro del genero del Metalcore.
Una vez superado el mal sabor de boca
que nos dejó el abrupto final del show de Dischord
y luego de unos cuarenta minutos de espera, las luces se apagaron y los
norteamericanos Testament,
arrancaron con lo que sería su segunda presentación en Venezuela.
Mucha expectativa se había generado
por ver a los legendarios thrashers de Bay Area en Caracas, incluso por ser el
primer Gillmanfest en esta ciudad;
sin embargo la actuación de de estos no parece haber dejado a todo el mundo
satisfecho. Chuck, Eric, Alex, Greg y Jon dieron un buen
concierto con varios de sus clásicos interpretados de manera perfecta, todos
los que allí estuvimos pudimos tener una hora y quince minutos de buen thrash
metal de la vieja escuela, con un sonido que honestamente no estuvo acorde al
evento, en muchas zonas del recinto mejoraba, mientras que en otras era
simplemente malo.
Una razón por la cual esta presentación pudiese no haber sido tan
espectacular como esperábamos, pudiera atribuirse al cansancio de la banda,
pues pudimos conocer que luego de haber tocado en Colombia el día anterior,
llegaron a Caracas (Maiquetia) apenas el mismo día domingo y en horas del medio
día; quizás por ello la actuación de Testament
si
bien no fue mala ni mucho menos, dejó a muchos con la percepción de que faltó
algo de chispa al asunto y que pudo ser mejor. Incluso, si el mismo Chuck
“Billy” hubiese tenido algo más de comunicación con los presentes, pudiésemos haber
tenido una apreciación distinta, pero, ya sabemos como son algunos músicos y
que a veces no están en sus mejores días.
Algunos también cayeron en el error de
comparar esta actuación con la de Valencia de hace unos años, donde la banda
sonó simplemente fenomenal, pero, en condiciones muy distintas, pues, pudieron
llegar al país dos días antes del show y donde estaban bastante relajados y
descansados, ya que no se encontraban en gira en aquel momento.
Setlist completo de Testament:
For the Glory
More tan meets the Eyes
Electric Crown
New Order
The Preacher
Practice What You Preach
Into the Pit
Souls of Black
The Legacy
D.N.R
3 days in Darkness
Over the Wall
Alone in the Dark
Disciples of the Watch
Muchas cosas positivas quedaron de
este primer Gillmanfest en Caracas,
sobre todo y de manera muy resaltante el apoyo que recibió evento. La buena
organización en general que Aleindigo
mantuvo es la que ya conocemos y estamos acostumbrados. Sin embargo, siempre se
pueden mejorar, por ello nos permitimos igualmente acotar algunos aspectos que
desde nuestra óptica, pudieran tomarse en cuanta para futuros eventos:
La primera va dirigida a la
iluminación en tarima, pues, las luces no fueron las mejores y tomando en cuenta
que muchas bandas internacionales no permiten el uso de flash en las fotografías,
consideramos que puede hacerse un mejor trabajo en este sentido. Lo otro es el
hecho de que no haya habido ningún tipo de restricción con el ingreso de
cigarrillos y encendedores al recinto, pues, no hubo ningún tipo de control en
este aspecto. Esto ocasionó una gran nube de humo de cigarrillo, la cual se
acumuló dentro de las instalaciones durante varias horas; recordemos que el
CIEC es un sitio totalmente cerrado, donde el ambiente esta bajo el sistema de
aire acondicionado. Esto se convirtió no solo en una molestia para los no
fumadores y en algo nocivo para la salud, sino en un altísimo riesgo a nivel de
seguridad, llegando a estar en juego la integridad física de los presentes,
pues el sitio está totalmente alfombrado.
Un extraño, positivo y muy concurrido Gillmanfest Caracas “Edición Especial”
nos dejó una muy buena tarde / noche de Rock en la capital, donde las bandas
nacionales y la organización se llevaron un sobresaliente, mientras que los
invitados, solo un aceptable.
Reseña y fotografías por Julio Pereira
Petit.
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