Uno de los
eventos mas esperados de los últimos años, por fin llegaba el momento, pero
este venia de la mano de muchísima polémica! Pues los hermanos Cavalera fueron
anunciados para cerrar el afamado GillmanFest en su edición de Aragua. Lo
ciertos es que entre si y no Aleindigo Producciones tomaron la fecha para así
complacer al público y no perder la oportunidad de tener en Venezuela a los
Cavalera Conspirancy.
El evento estaba
“pautado” para las 7:00 pm, aunque si nos ponemos a ver dicho horario no
aparecía en el flayer! En medio de la espera y una cola llena de fanáticos los
cuales se desplazaron desde diferentes puntos de nuestra geografía Rockera,
aproximadamente a las 11:30 pm arrancaría el concierto… Epa!!! Y los teloneros?
Hablamos de Dischord, es entendible que por problemas de tiempo y sonido el
talento Venezolano no pudo presentarse! Esto nos deja ver el primer signo de
desorganización. Lo cierto es que Cavalera Conspiracy abrirían su propio evento
y dejando así a Dischord por fuera.
Problemas en
el sonido se veían venir desde la “prueba realizada por los técnicos” un
concierto lleno de magia y desacuerdos, un local para nada apto, sin photopit
ni seguridad, bueno si había seguridad…. Pero en la puerta haciendo su agosto
en noviembre!!!
Luces
apagadas anunciaban la apertura del evento, así es cuando los Cavalera y
compañía salen a dar lo mejor de un pasado y presente; un Max muy emocionado y
un público que devolvía la misma energía, “Warlord” fue la pieza apropiada para
arrancar la fiesta, en menos de un segundo las hoyas se activaron, estaban
frente a nosotros luego de mas de una década. Seguidamente sonaron “Inflikted” y una de las más disfrutadas
“Refuse/Resist”, definitivamente la historia se estaba escribiendo en Maracay!
Los problemas a nivel de sonido persistían, Igor Cavalera en definitiva es uno
de los mejores bateristas de la historia, cada día más agresivo y más brutal
con su instrumento.
“Sanctuary” y
“Terrorize” fueron las responsables del caos, este no se comparo al estallar “Territory”,
la locura se desato en todo el lugar, “también fuera de este” como siempre y
como lamentablemente la historia nos muestra, siempre están los vividores y
según “vivos” que prefieren invertir su dinero en muchísimo alcohol y drogas y
no piensan en la entrada para un buen evento, bueno, si piensan… pero en entrar
gratis; como si ellos fuesen especiales ¿Qué carajo tienen estos tipos en la
cabeza? Estos empezaron a lanzar cualquier tipo de objeto desde afuera, sin
pensar en el daño que podían causar a quien si pago para disfrutar y no para
estar pendiente de caer desplomado gracias al impacto, como logramos ver.
Creo que ya
basta de que “personas” como estas traten de arruinar nuestra fiesta, ya basta!
A fin de cuentas y luego de una buena batalla entre “seguridad” y los “vivos”
la calma retorno. Aleindigo Producciones
debe tomar en cuenta estas experiencias para así evitar que el público que
compra una entrada no tenga que pasar por esto.
Tony Campos excelente
músico, también conocido por su trabajo con bandas como; Static X, Asesino,
SoulFly entre otras, retumbo con su bajo, pero tampoco escapo de las garrar del
mal sonido que los acompañaba esa noche, puede que en tarima sonaban bien, pero
fuera de esta era un desastre, Igor no quedo exento pero dentro de todo era la
parte del sonido que se logro recuperar.
“Killing
Inside” y la aplastante “Blunt Force Trauma” le darían paso al momento donde la
banda se convierte en casi la verdadera conspiración Cavalera, hablamos del
tema “Black Ark” donde cantan Igor Jr quien también toca la batería y Ritchie vocalista
de su banda llamada Incite… estos quedaron a cargo de las voces, ahora… si
estos fuesen bajista y guitarrista, la banda seria una verdadera
conspiración!!! Seguidamente sonaría un cuarteto de temas donde muchos
seguramente recordaron la última visita de los Cavalera. “Arise” la cual ya
sabíamos que vendría mezclada con “Dead Embryonic Cells”, una increíble “Inner
Self”, la desgarradora “Troops of Doom” y el momento de la locura
“Propaganda”….
Marc Rizzo
demostró con su guitarra el poderío musical que lo acompaña, este viene
trabajando con Max en SoulFly, además de su paso por Ill Niño y sus proyectos
solistas. “I Speak Hate” preparo el terreno para disfrutar de “Attitude” y el
cierre magistral a cargo de “Roots Bloody Roots”.
Max no podía
ocultar la satisfacción de estar acá, pudimos escuchar un millón de criticas,
que si Max esta quemado, que no canta ni toca, que la banda es una
c@#&%a... En fin… ¿acaso no vieron los últimos conciertos por internet, no
sabían lo que verían esa noche? Creo que los mas sano es ponerse a trabajar!!!
¿Qué el evento presento mucho problemas, incluso de organización? Si!!! Pero
estamos seguros que Aleindigo Producciones tomara cartas en el asunto, lo que
si pareció una verdadera burla y falta de respeto es que luego de una ardua
jornada, pretendan anunciar a la banda “telonera”, pero lo peor es que luego de
unos 15 minutos empiezan a quitar el sonido y adiós. Por favor seriedad
hermanos…
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Reseña por
Juan Carlos Castillo.
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